Identificamos lo que todavía se desconoce y vemos, en ese desconocimiento, un desafío para posteriores aprendizajes antes que un factor de desaliento o de conformidad en la ignorancia compartida.
Incrementar la capacidad para el aprendizaje del alumno por si mismo, de forma autónoma, e implicarle en el estudio de los problemas de una forma lógica, analítica y científica.
Aceptar la necesidad de obtener información de diversas fuentes, aprender a transmitirla, a preguntar a iguales críticamente, sin ofender ni sentirse ofendido.
Implicar al alumno en el uso de las nuevas tecnologías y su aplicación a la búsqueda bibliográfica y a la presentación de material científico-técnico.
El desarrollo de competencias genéricas, tales como la capacidad de organización del trabajo o el sentido de trabajo en equipo, prepara a los estudiantes para confiar en los demás integrantes del grupo y conocer las ventajas del trabajo cooperativo.
La difusión ayuda a los alumnos a comprender la utilidad de determinadas herramientas o procedimientos, la necesidad de cuidar la presentación, de una correcta redacción y ortografía, etc. |